El
altruismo tiene una base genética, pero la cultura lo modula. Los niños son
generosos por naturaleza en sus primeros años de vida, se vuelven más egoístas
hasta alrededor de los siete años y luego aprenden a ser más generosos de acuerdo
con las normas sociales de su comunidad. Esto releva un estudio de antropólogos
de la Universidad de California en Los Angeles (UCLA), en su estudio que han
realizado en 326 niños y niñas de entre tres y catorce años de seis sociedades
distintas. Otro estudio estadounidense, presentado este año en Plos One, ha
mostrado que los niños de 3 y 4 años ya defienden que ellos y los demás deben
repartir lo que tienen de manera equitativa pero que no empiezan a hacerlo hasta
los 7 u 8 años.
El periódico La Vanguardia 2013-08-20
No hay comentarios:
Publicar un comentario