Una de cada ocho personas en el mundo sufre desnutrición
crónica según las agencias de alimentos de las Naciones Unidas, que advierten a
los líderes mundiales de que muchas regiones del planeta
fracasarán en reducir a la mitad la cifra de afectados por el hambre para el
año 2015.
Estiman que 842 millones de personas sufrían hambre crónica en el periodo 2011-13, el 12 % de la población mundial, frente a un 17%
en 1990-93. El problema es que hay grandes desigualdades en el progreso de los
Objetivos de Desarrollo del Milenio de reducir a la mitad el hambre en el
mundo. El problema reside en los países en conflicto o en países sin litoral
(no tienen acceso a los mercados mundiales). Países con poca infraestructura e
instituciones débiles.
El
periódico elmundo.es 2013-10-01
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